jueves, 28 de abril de 2011

Los vientos justicieros de Dios como precursores de mayores juicios al país del Norte

Huracanes dejan 220 víctimas en el sur de EEUU

En las últimas horas volvió a elevarse el número de muertos a causa de tormentas e inundaciones en Tennessee. El Servicio Meteorológico Nacional advirtió que las peores condiciones aún están por llegar

El centro de operaciones de emergencia de Tennessee confirmó los 30 muertos en seis condados víctimas de las fuertes tormentas del miércoles, en lo que se perfila como el peor desastre natural en años en Estados Unidos.

Otras regiones sufrieron pérdidas similares. La mayoría de las personas que murieron en Alabama se encontraban en Tuscaloosa. Otras 32 personas fallecieron en Mississippi, 11 en Georgia, y una en Virginia.

Según el Centro de Predicción de Tormentas, este miércoles se reportaron 155 tornados en Estados Unidos, lo cual eleva la cifra a más de 800 este mes, un número superior a los de igual lapso de 2003 (543).

Ante la situación, el presidente Barack Obama conversó vía telefónica con el gobernador de Alabama, Robert Bentley, y le prometió ayuda federal.

El sistema combinado con tornados propagó destrucción la noche del martes y el miércoles desde Texas hasta Georgia. Un anterior brote de tormentas esta semana ya había matado a 10 personas en Arkansas y una en Mississippi.

Los meteorólogos advirtieron que condiciones aún peores podrían estar en camino. Se prevé que el sistema golpee Georgia, Tennessee y Kentucky en la noche del miércoles y luego las Carolinas (Norte y Sur).

"Hoy es el día en que usted quiere ser cuidadoso", dijo Greg Carbin del Centro de Predicción de Tormentas del Servicio Meteorológico Nacional en Oklahoma.

En la mañana del miércoles, un oficial de policía de Louisiana en un viaje a un campamento en el condado de Choctaw, Mississippi, murió cuando un árbol de liquidámbar cayó sobre su tienda mientras protegía a su pequeña hija con su cuerpo, dijo Kim Korthuis, un supervisor del Servicio Nacional de Parques. La niña no resultó herida.

La pequeña de 9 años de edad fue llevada a una casa rodante a unos 30 metros, donde el voluntario del campamento, Greg Maier, se alojaba con su esposa. Maier fue quien regresó para ver al padre y lo encontró muerto. "Ella no estaba lastimada, sólo asustada y empapada", dijo.

También en Mississippi, un hombre fue aplastado en su casa rodante cuando un árbol cayó durante la tormenta, un camionero murió después de chocar contra un árbol caído en una carretera estatal y un miembro de un equipo de carretera del condado murió cuando lo golpeó un árbol que estaban retirando.

La noche del miércoles se reportaron otras cuatro muertes por la tormenta en Mississippi, pero las circunstancias no estaban claras. El gobernador también declaró el estado de emergencia para la mayor parte del estado.

El astro de los Phillies de Filadelfia, Roy Oswalt, estaba en su camino de regreso al estado, pues dejó al equipo de béisbol antes de su juego de miércoles en Arizona para poder ver a su familia y su casa allí.

Alabama, también en estado de emergencia, fue el escenario de al menos cinco muertes relacionadas con la tormenta. Una mujer murió cuando su casa rodante fue despedazada, y una segunda mujer estaba atrapada en una casa rodante en otro lugar. Los árboles caídos o las ramas también mataron a una mujer en su casa, a un hombre en la calle y a un motorista en diferentes lugares.

Tanto en Mississippi como en Alabama, numerosos árboles caídos bloquearon los caminos e impidieron la respuesta de los servicios de emergencia, así como la evacuación de quienes intentaban huir de las áreas afectadas.

El Servicio Meteorológico Nacional no confirmó de inmediato si el daño fue causado por tornados, pero los meteorólogos habían emitido varias advertencias de tornado y dijeron que los vientos soplaron hasta a 112 kilómetros por hora (unas 70 millas), casi la misma fuerza de un huracán.

El Departamento de Emergencias de Arkansas confirmó que una persona murió en una tormenta en el condado de Sharp.

En Georgia las tormentas afectaron las zonas noroeste del estado, derribaron árboles, rompieron ventanas y arrancaron parte del techo de una escuela; además fue emitido un aviso de tornado.

 Fuente: America Infobae

domingo, 17 de abril de 2011

Situación muy seria que los gobiernos no tienen en cuenta....

Informe científico asegura que el cambio climático devora las costas del Ártico

El texto fue elaborado por treinta profesionales de diez países que ha analizado la situación de 100.000 kilómetros de costa.

 

BERLÍN.- Berlín, 17 abr (EFE).- El calentamiento global está devorando las costas del Ártico, donde erosiones de hasta diez metros al año están afectando a poblaciones humanas y amenazando la supervivencia de especies locales de plantas y animales. 

Ésta es la principal conclusión de un doble estudio hecho público hoy por un consorcio de treinta científicos de diez países que ha analizado la situación de 100.000 kilómetros de costa o cerca del 25 % de las fronteras terrestres de los ocho países que lindan al norte con el océano Ártico. 

"Parece que la erosión de las costas del Ártico se está acelerando de forma dramática. El recorte medio es de medio metro al año, pero en algunas zonas llega a ser de diez metros al año", dice Volker Rachold, investigador del Instituto Alfred Wegener de Potsdam (este de Alemania).

Las áreas más afectadas son, según este novedoso informe científico, el mar de Laptev y el este de Siberia, ambos en Rusia, y el mar de Beaufort, que limita con las costas de Canadá y Alaska (Estados Unidos). 

El estudio alerta de que, como las costas del Ártico suponen un tercio del total de las costas del planeta, "la erosión puede llegar a afectar a áreas enormes en el futuro".  

Este retroceso de las costas es consecuencia, sin duda, del calentamiento global, un problema que se agrava en el Círculo Polar Ártico, donde los incrementos doblan el aumento térmico medio global, explica el investigador alemán. 

Este proceso climatológico está descongelando parte del "permafrost" costero, la capa de hielo permanente de los niveles superficiales del suelo propia de regiones muy frías, lo que desbarata el de por sí fragmentario terreno sobre el que se asienta y lo deja totalmente expuesto al fuerte oleaje del océano Ártico.

   "Vemos rápidos cambios en una situación que ha permanecido estable durante milenios", denuncia el estudio, el primero de carácter comprensivo que analiza las consecuencias físicas (geológicas y químicas), ecológicas y humanas de la erosión de las costas árticas. 

Su impacto es "substancial” para los ecosistemas árticos costeros y para la población humana asentada en esas regiones, apunta el documento “Estado de la Costa Ártica 2010", de 170 páginas y disponible en internet.  
Los más afectados por estos cambios son los animales salvajes que habitan en esas regiones, especialmente los extensos rebaños de renos y caribús, y los frágiles ecosistemas de los lagos de agua dulce próximos a la costa. 

El hombre también se ve afectado por este grave proceso erosivo, pero dada la escasa población en las costas más septentrionales del planeta, el estudio le retrata más como acicate que como víctima en este problema medioambiental.

Rachold reconoce que hay "grandes intereses" económicos y comerciales para que no se tomen medidas para frenar este proceso: la región ártica es una fuente de recursos naturales como petróleo aún virgen y su deshielo podría abrir codiciadas rutas marítimas de transporte de mercancías. 

Además, las tímidas legislaciones que ya se han aprobado para frenar la erosión costera son de carácter nacional y no está siquiera prevista la negociación de una normativa internacional de protección. 

El trabajo científico, que precisará de estudios subsiguientes para confirmar la tendencia y evolución de este proceso, ha estado liderado por el Comité Científico Internacional del Ártico (IASC) y alentado por otros programas e instituciones científicas internacionales. 

"Tenemos que seguir investigando en los próximos años. Aún nos faltan datos y no podemos hacer comparaciones con la situación de las costas del Ártico en el pasado", indica Rachold.

 

viernes, 15 de abril de 2011

Y todavía falta el más fuerte....!

Más de mil temblores han sacudido Japón desde el 11 de marzo

La magnitud de 405 de ellos ha sido superior a los 5 grados, según portavoz de la Agencia Meteorológica nipona
Tokio (EFE). Más de mil sismos superiores a una magnitud 4,5 Richter han sacudido Japón desde el terremoto y un devastador tsunami del 11 de marzo pasado, que dejó más de 28.000 víctimas entre muertos y desaparecidos.

Según datos del Instituto Geológico de EE.UU. (USGS), hasta hoy, jueves, a las 17.00 hora de Japón (08.00 GMT) se habían registrado en este país al menos 1.001 temblores de más de 4,5 en la escala de Richter.

Un portavoz de la Agencia Meteorológica nipona detalló que 408 movimientos telúricos han tenido una magnitud de 5 o más grados en la escala Richter y que, de tener en cuenta aquellos de al menos 4 grados, la cifra podría multiplicarse por diez.

De los temblores registrados desde el 11 de marzo, un total de 68 han sido de 6 o más grados Richter y otros cinco han registrado al menos 7 grados, la misma magnitud del terremoto que dejó unos 300.000 muertos en Haití en enero de 2010.

El terremoto de magnitud 9 Richter que hace poco más de un mes sacudió el noreste nipón fue el más fuerte en este país desde que se iniciaron las mediciones, hace 140 años, y estuvo seguido de un gran tsunami con olas de hasta quince metros.

A más de un mes de la catástrofe, la cifra de muertos se sitúa en 13.456 y todavía hay 14.851 desaparecidos, según el último recuento policial.

La tragedia provocó además una grave crisis nuclear en la planta de Fukushima, donde los operarios continúan trabajando día y noche para tratar de refrigerar los reactores de la central y contener la radioactividad.

Japón se asienta sobre el llamado Anillo de Fuego del Pacífico, por lo que está relativamente acostumbrado a temblores que, en su mayoría, no tienen consecuencias graves por las estrictas normas de construcción en vigor.

Hasta el del 11 de marzo, el terremoto más grave en la historia reciente de Japón era el de 7,2 Richter que sacudió la ciudad de Kobe en 1995, que causó la muerte de unas 6.400 personas.

miércoles, 13 de abril de 2011

Para entender lo situación de Japón

La escala INES 
de accidentes e incidentes nucleares

La escala INES, en vigor desde el año 1990, contempla siete niveles para clasificar los incidentes y accidentes y un nivel 0 para referirse a sucesos sin consecuencias para la seguridad que se denominan "desviaciones".

Los niveles 1 a 3 corresponden a incidentes y los niveles 4 a 7 a accidentes.

Nivel 1 - Anomalía: Problemas de seguridad menores sin impacto en la población o el medio ambiente.

Nivel 2 - Incidente: Exposición de una persona del público por encima de 10 milisieverts (mSv) o de un trabajador por encima de los límites anuales reglamentarios. Niveles de radiación superiores a 50 mSv/h en una zona de operación no prevista.

Nivel 3 - Incidente importante: exposición diez veces superior al límite anual establecido para la exposición de los trabajadores con efectos sanitarios no letales (quemaduras). Contaminación grave en una zona no prevista.

Nivel 4 - Accidente con consecuencias locales: liberación menor de materiales radiactivos. Al menos una muerte por radiación. Fusión de combustible o daño que provoca una liberación superior al 0,1% del inventario del núcleo. Liberación de cantidades considerables de materiales radiactivos dentro de una instalación.

Nivel 5 - Accidente con consecuencias de mayor alcance: liberación limitada de materiales radiactivos. Varios fallecimientos por radiación. Daños graves en el núcleo del reactor. Liberación de grandes cantidades de materiales radiactivos dentro de una instalación, con alta probabilidad de exposición del público, provocada posiblemente por un incendio o un accidente de criticidad grave.

Nivel 6 - Accidente importante: liberación importante de materiales radiactivos, que probablemente requiere la aplicación de las contramedidas previstas.

Nivel 7 - Accidente grave: liberación grave de materiales radiactivos con amplios efectos en la salud y el medio ambiente, que requiere la aplicación y prolongación de las contramedidas previstas.

Fuente:  Muy Interesante

El caso Fukushima está siendo tapado con mentiras

Fukushima es un Chernobyl en cámara lenta

La planta asume la gravedad. Admite que la radiación puede superar la de 1986. Y no garantiza que pueda controlarla. 

TOKIO, Japón.- Tarde, según algunos, pero seguro. Japón admitió al fin la gravedad de Fukushima, cuya fuga radiactiva, a la que hasta ahora no saben cómo controlar, puede terminar superando la de Chernobyl. El sector crítico con la energía nuclear lo resumió en una frase: "Fukushima es un Chernobyl a cámara lenta". 
Poco más después de un mes del terremoto y el tsunami, el Gobierno japonés calificó al accidente como un siete (el máximo de los niveles) en la escala internacional INES. Sólo Chernobyl, en 1986, había alcanzado ese grado, que es el obligado cuando hay "liberación grave de materiales radiactivos con amplios efectos en la salud y el medio ambiente", reprodujo el diario español "El País". 
Pese a los intentos de las autoridades niponas por diferenciar a Fukushima de la central soviética, la compañía Tepco -que administra la planta nuclear- admitió: "la fuga radiactiva no ha terminado y nuestra preocupación es que vaya a superar la de Chernobyl". Para peor, nadie garantiza que Japón pueda controlar pronto lo que ocurre en los reactores.
Por su parte, el primer ministro japonés, Naoto Kan, negó que haya ocultado información al respecto. En cambio, pidió que los habitantes no afectados mantengan su vida diaria, compren productos de las zonas castigadas por el tsunami y que persista la unidad para superar la peor crisis que atraviesan desde la Segunda Guerra Mundial.

lunes, 11 de abril de 2011

Una tala genocida

Deforestan último territorio de indígenas en Paraguay 

(EFE). Survival International denunció hoy la destrucción de 4.000 hectáreas de bosque en la región del Chaco, en el norte de Paraguay, perfectamente documentada en imágenes obtenidas mediante satélite.

Las compañías brasileñas Rivar Plate y BBC S.A fueron sorprendidas en ese tipo de actividades en una operación secreta de las autoridades regionales e indígenas del Chaco.
Se trata de una zona donde viven los Ayoreo-Totobiegosode, el último pueblo indígena que queda fuera de la Amazonía cuyos miembros no ha estado aún en contacto con la civilización.
La mayor parte de esas tierras ancestrales de los indígenas ha sido ocupada por ganaderos privados.

Ojnai, uno de los pocos miembros de la tribu que han establecido contacto con el mundo exterior, manifestó a Survival International su profunda preocupación por esa destrucción porque “no sabemos exactamente en qué parte de la selva vive la gente”.

El Instituto Indígena de Paraguay declaró recientemente que 34.000 hectáreas compradas a los ganaderos les sería entregada a los Ayoreo, pero queda por fijar aún una fecha.

Según Survival, las negociaciones con otras compañías, entre ellas la empresa brasileña Yaguarete Pora, no han prosperado hasta ahora dado que los ganaderos no quieren revender esas tierras.

“Los ganaderos, como los Totobiegosode, no pueden ocultar nada. Las imágenes obtenidas mediante satélite hacen imposible que pase inadvertida la enorme deforestación, y las autoridades deben actuar preventivamente, no después de la destrucción”, dijo el director de Survival, Stephen Corry